Muchas organizaciones implantan medidas de carácter lúdico, de interrelación entre los empleados/as, etc. que sin duda contribuyen a mejorar el clima laboral y hacer del entorno laboral un espacio agradable. No obstante, en ningún caso estas medidas pueden entenderse como medidas de BIENESTAR SOCIAL.

El Bienestar Social puede ser entendido como el equilibrio de todo el funcionamiento social de la persona que le permita una promoción y crecimiento personal en los contextos en los que participa (entorno laboral, familiar, con la comunidad, económico.) Debe tratarse de un engranaje perfecto, por lo que los déficits que pudieran presentarse en algunos de estos contextos, afectarían directamente a su posición en los demás espacios.

Procurar el equilibrio entre estos contextos, es la meta a perseguir con los PLANES DE BIENESTAR SOCIAL en las organizaciones.